Jueves Santo. 5 abril 2012
Evangelio según sanJuan 13, 1-15
“Vosotros me llamáis Maestro y Señor, y decís bien, porque lo soy. Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies unos a otros; os he dado ejemplo os he dado para que, como yo os he hecho, vosotros también hagáis” Juan 13,13-15
DE LA PALABRA DEL DÍA
Ningún ser humano es superior a otro. Dios se ha hecho un ser humano más en Jesús de Nazaret y nos da una lección que no acabamos de aprender. Jesús, conociendo las debilidades humanas, la soberbia, la vanidad, instruye con el ejemplo, llama a la igualdad, a la solidaridad y al servicio.
Jesús como Maestro, podía recibir un trato especial como le correspondía. Sin embargo se despoja de su manto y realiza el oficio reservado a los esclavos. Suele decirse que las palabras convencen pero el ejemplo arrastra. El muestra con este gesto lo que ha sido la dinámica de su vida, cómo se ha situado en la historia. Ahora, en cada tiempo, cada discípulo y discípula si quiere ser fiel a su Maestro tendrá que seguir sus pasos, reproducir sus gestos.
Hoy hay una cultura de espacios VIP (very important people = para gente muy importante), se incita a ganarse y disfrutar de privilegios a los que la gente corriente no va a poder acceder. Pero para el cristiano, siguiendo las huellas de su maestro, todas las personas son importantes por su dignidad de hijos e hijas de Dios y los más importantes en el Reino son los más necesitados. Tenemos que recuperar el sentido de familia humana, donde cada uno es querido por sí mismo no por lo que tiene o acumula. Es más, no hay nada que acumular, sino compartir poniendo en práctica la humildad y el servicio.