DE LA PALABRA DEL DIA
"¿Si puedo? Todo es posible para el que cree". Marcos 9,23
¿Cómo vivir esta
Palabra?
La fe es
necesaria para conocer a Dios y Dios mismo la ofrece como don a todos, sólo es
necesario pedirla. Quien desea la fe, quien siente tener necesidad de ayuda de
Aquel que lo puede todo, ese tiene ya un mínimo de fe.
En el
Evangelio de hoy, el padre del muchacho enfermo (en aquella cultura cada enfermedad era un demonio), reconoce sus
limitaciones, pero tiene fe suficiente
para suplicar: “ayuda mi falta de
fe”. El padre estaba angustiado por
su hijo, pero Jesús tenía a los dos en el corazón, por ello el padre recibe el aumento de su fe mientras que
el hijo se ve libre de su mal.
El espíritu
del mutismo que atormentaba al muchacho manifiesta
hasta donde la sordera en las relaciones con Dios puede llevar a una
persona a no oír la palabra de Dios y a no sentir ya el amor del Padre. Encerrado
en su egoísmo, el sordo ya no escucha y
permanece en el pecado, abusando de su libertad, por una autonomía falsa
y engañosa, mientras el Padre no deja hablarle y de amarlo.
En mi pausa contemplativa de
hoy, repetiré en mi corazón:
Todo es posible para el que cree
¡Señor, ayuda mi incredulidad!
La
voz de un político de hoy
La fe responde al deseo humano
más fundamental, irrepetible, “irreprimible” de hacer el bien, de ser mejor, de
pensar y obras más allá de los límites de los
egoísmos humanos.
Tony Blair